ASORCAD. Hoy en día contamos con muchas herramientas para acelerar las fases conceptuales iniciales del proceso de diseño. La tableta gráfica ha reemplazado al viejo tablero de dibujo, las impresoras 3D pueden crear formas y la realidad virtual es cada vez más realidad.
Hace pocos años, se partía de un boceto que se llevaba al taller de un escultor. El escultor hacía un modelo basado en el boceto y proporcionaba una escultura. Después se intentaba reproducir el trabajo del escultor en un software CAD. Para hacer la escultura se necesitaba como mínimo un mes, y eso era sólo el principio del proceso.
Hoy en día, hay nuevas herramientas para hacer que el proceso de diseño sea más eficiente sin renunciar a la excelencia del trabajo bien hecho.
De estas nuevas herramientas son el escaneado 3d y la impresión 3d las dos técnicas más eficaces y rápidas que existen, por ser las más versátiles y ofrecer una forma rápida y eficaz de interactuar con el diseño asistido por ordenador (CAD).
Casi todos los proyectos de diseño empiezan con una idea y un boceto dibujado a mano alzada, rápidamente sobre cualquier papel. Con un software de modelado (cada día más accesibles y fáciles de usar) el diseñador del producto puede crear un diseño aproximado en pocos minutos y en 3 dimensiones. Una vez que se completa el diseño aproximado, se puede hacer una primera pieza de prueba fabricada con una impresora 3D, en poco tiempo y con un coste mínimo. Siendo así, se pueden hacer varias versiones o rediseños hasta conseguir el modelo ideal sin tener que invertir mucho tiempo ni recursos en el proceso.
Este proceso iterativo permite al diseñador, utilizando un escáner 3D y una impresora 3D, hacer la forma exacta que tiene en mente más fácil y más directamente a mano, pero luego, hacerla perfectamente simétrica es mucho más fácil y rápido con un software; aquí es donde ambos métodos funcionan perfectamente juntos.
Se necesitan realizar muchas iteraciones y muchos prototipos a lo largo del proceso, por lo que el ahorro de tiempo en cada una de las fases es la razón de peso para incorporar estas nuevas herramientas digitales al trabajo del diseño de prototipos.
Pero hablando del tiempo que se ahorra, no nos olvidemos del tiempo que sobraría y las cosas nuevas que se pueden crear con ese tiempo extra si se utiliza para la primera y más importante fase del diseño: La idea.
Para esta fase no existen herramientas digitales, ni de ningún tipo. La idea es y será siempre genuina del ser humano, lo único que puede (y debe) cambiar con el tiempo son las herramientas para crear, nunca la creación.
La competencia en la industria es cada día más intensa. Para ser competitivos es necesario utilizar herramientas y procesos cada vez más rápidos y eficaces. Pero, además, los consumidores son cada vez más exigentes y tienen más opciones de compra, por lo que no sólo es necesario que el producto sea rentable y salga al mercado lo antes posible, también es fundamental que sea de la más alta calidad posible. Las herramientas digitales, los avances tecnológicos la realidad aumentada y el talento del futuro, sin duda traerán más cambios que conlleven más avances en la manera que se entiende el diseño de los productos. Es difícil imaginar un futuro donde los objetos se imaginen por ordenador, pero sí que ya está aquí el futuro en el que los mejores diseñadores de productos son los más adaptados a nuevas tecnologías como el escaneado 3d, el diseño asistido por ordenado o la impresión 3d.
