Por Pilz. Javiere Echavarría
Hace unos días estaba visitando a un importante cliente del sector de automoción en el País Vasco, y comentaba, en un tono un tanto irónico, que la seguridad de maquinaria no servía más que para complicar los procesos productivos e incrementar los costos. Ante mi asombro, traté de convencerle de la importancia de la seguridad en los procesos productivos y la obligatoriedad de la aplicación de las Directivas de Máquina y los Reales Decretos de cada país, así como de las responsabilidades civiles y penales a las que se arriesga la empresa que incumpla dichos Reales Decretos y el costo que supone el hacer frente a un accidente grave que podía haberse evitado instalando dispositivos de protección y seguridad.
Me constaba que en dicha planta aplican todas las disposiciones de seguridad, por lo que le pregunté por qué estaban ellos cumpliendo dichas disposiciones. Siguió con evasivas. En el fondo, trataba de transmitir una queja sobre lo poco rigurosos que son los controles que se realizan en tema de supervisión en materia de Seguridad y Salud por las empresas de evaluación competentes y la gran diferencia de unas empresas con otras a la hora de emitir informes de Análisis y Evaluación de Riesgos.
En efecto, no todas las empresas que realizamos este tipo de Servicios lo realizan con la misma rigurosidad y aportando información relevante para el cliente que le permita saber cómo está su máquina o instalación en materia de Seguridad. Así nos encontramos que los Análisis de Riesgos y la Aplicación del Concepto de Seguridad realizados por una u otra compañía difieren mucho en calidad y detalles técnicos así como el tipo de aportación a la hora de dar soluciones a dichos riesgos. El conocimiento y la experiencia que ofrece Pilz está demostrada por los años que lleva trabajando en el sector y la calidad de sus Servicios de Seguridad. Nuestros clientes lo saben apreciar y saben que lo que pagan por el servicio está de sobra justificado.
Desde el punto de vista de las auditorías por parte del Servicio Vasco de Seguridad y Salud en el Trabajo (OSALAN) , le comenté que me constaba que dichas auditorías se estaban realizando rigurosamente, al menos en el País Vasco, y que si no habían sido visitados es porque estaban cumpliendo con los requisitos exigidos y que no verían necesario dicha revisión, pero que tenía noticias de su actuación en empresas que no tienen adecuadas las máquinas al RD 1215 y que les habían dado plazo para su adecuación. Parece que no le convenció la respuesta y que lo que esperaba era una mayor vigilancia y control en dicha materia.
Es bastante típico que cuando cumplimos una serie de requisitos exigidos, seamos celosos en que el resto también los cumplan. Creo que este era el caso de mi interlocutor. Sin embargo, en materia de Seguridad tenemos que procurar que cada uno vigile y asegure los niveles de Seguridad para evitar y reducir al máximo los accidentes de trabajo que suponen un gran costo social y desgracias personales y familiares.
En mi experiencia profesional, tengo que decir que en el País Vasco el nivel de concienciación respecto a la Seguridad en maquinaria y en líneas de proceso, es de lo más elevado, atendiendo a las Directivas de Máquina en vigor y sus correspondientes Reales Decretos. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer y es nuestra labor transmitir dicha preocupación a los fabricantes y productores para minimizar accidentes realizando los correspondientes Análisis de Riesgos y la aplicación de medidas correctoras para la reducción de los niveles de Riesgo.
