Con el objetivo de simplificar la representación y el intercambio de los datos de corte, el fabricante de herramientas de corte y sistemas portaherramientas Sandvik Coromant ha adoptado el estándar ISO 13399. Entre los beneficios que esto supone para el cliente se encuentran unos costes de administración de la información de las herramientas reducidos, y un uso más preciso y eficiente de los recursos de fabricación. Es decir, ya no es necesario modificar los reglajes de programación existentes para el uso de herramientas de Sandvik Coromant.

ISO 13399, un estándar internacional para la representación y el intercambio de los datos de los productos a través de programas informáticos, es el resultado de la colaboración entre Sandvik Coromant, el Royal Institute of Technology de Estocolmo, el Cetim (centro técnico para ingenieros mecánicos) francés y otras entidades importantes dentro del sector del corte de metal. Su objetivo es ofrecer un sistema capaz de describir datos de producto relativos a herramientas de corte en un formato independiente de cualquier sistema específico. El resultado es una base no sólo adecuada para el intercambio completamente neutro de archivos, sino también para implementar y compartir bases de datos y sistemas de archivo de productos.

Diseñado con el fin de facilitarle la vida al ingeniero, ISO 13399 se puede implementar para simplificar y optimizar el intercambio de datos entre sistemas CAD, CAM, CAE, PDM/EDM y otras tecnologías informáticas.

Formato neutral

ISO 13399 permite comunicar la información de las herramientas de corte utilizando un método lógico y estandarizado en un lenguaje fácil de procesar por los programas informáticos. Como resultado, tanto Sandvik Coromant como sus clientes comparten las mismas definiciones de parámetros, lo cual es importante para la integridad de la comunicación e imprescindible para un intercambio efectivo de datos electrónicos.

En última instancia, ISO 13399 significa que la información de los productos de Sandvik Coromant está disponible de una manera que impulsa la eficiencia a lo largo de toda la cadena de valor, garantizando, en todo momento, la calidad para el cliente.