El instituto tecnológico metalmecánico AIMME, colidera un proyecto europeo que permitirá a los fabricantes de sectores como el aeronáutico y el biomédico diseñar sus propias piezas y encargar su fabricación en 3D en diferentes empresas y centros tecnológicos europeos, todas ellas con un elevado estándar de calidad. En total, se han sumado al proyecto, junto a AIMME, otro centro tecnológico del Reino Unido con capacidades de fabricación en 3D e importantes empresas usuarias de ámbito europeo. En el proyecto participan 12 entidades de 8 países europeos.

El ahorro estimado de costes para las empresas oscila entre el 30 y el 50%, en función de las piezas fabricadas.

El proyecto consiste en el diseño de una aplicación on line donde un fabricante puede introducir las especificaciones técnicas, -planos, dimensiones, características-, el material del que quiere que esté hecho y la tecnología que prefiere que se utilice.

Proyectos-Streamics

Además, la plataforma servirá como cuaderno de trazabilidad ya que incorporará toda la documentación de todos los agentes y materiales utilizados en la fabricación, de tal manera que el usuario final, industrial o doméstico, podrá conocer en todo momento la situación de su pedido y la documentación técnica de su producto.

Con estos datos, la plataforma ofrece la información sobre el fabricante que puede tener más cerca, los tiempos de producción y en cuanto tiempo puede tenerlo en sus instalaciones.

Según Luís Portolés, responsable técnico del proyecto en AIMME “el objetivo de este programa europeo es que una empresa pueda encargar una pieza y,  a través de la plataforma on line,  pueda conocer desde los tiempos de producción hasta confirmar el uso de los materiales elegidos, todo ello bajo los estándares de calidad exigidos por mercados como el biomédico y aeronáutico.” 

El proyecto está pensado, en una primera fase, para uso industrial, principalmente para los sectores aeronáutico y biomédico, “aunque, una vez esté en marcha, la comisión europea, busca que pueda abrirse a otros sectores, como el juguete y, finalmente, al consumidor final”.

Esquema-Mansys

En este sentido, el sector aeronáutico está representado en el proyecto por la empresa General Electric Avionics de Turquía y sus técnicos probarán la plataforma con el encargo de piezas para el interior de los aviones.

Por su parte empresas de biomedicina, tales como Smith & Nephew, Wisildent o TwoCare podrán solicitar la fabricación de implantes totalmente personalizados para sus pacientes y ajustados a las dimensiones exactas de cada persona.

El ahorro de costes para las empresas viene de la mano del aprovechamiento de una infraestructura trasnacional, ya que al unir en una misma plataforma a proveedores de materiales, fabricantes y técnicos en 3D, el cliente puede prescindir de la adquisición de estas máquinas de impresión en 3D. El proyecto estimo que el ahorro en costes de fabricación de las piezas pueden reducirse entre un 30 y un 50%.

Usuarios privados:

La plataforma espera poder generalizarse y que se convierta en una plataforma de uso doméstico. En una segunda fase del proyecto se dará entrada a otros sectores para que utilicen la plataforma, como son el de los juguetes.

Por este motivo, Luís Portolés, confirma que el diseño de la plataforma se está haciendo para un uso muy generalizado y no para técnicos. “Así –continúa el técnico- al finalizar el proyecto, una empresa o un particular, podrá encargar cualquier pieza que desee fabricar en 3D, totalmente personalizada y podrá hacer un seguimiento de su pedido igual que en cualquier plataforma de compra on line de  complementos ropa o accesorios de hogar”